Por Dr. Raúl Cobos
Un nuevo caso de éxito de un paciente tratado con Invisalign.
Cuando este paciente llegó a la consulta, presentaba una maloclusión importante (apiñamiento).
Esto ocurre cuando el maxilar no es lo suficientemente grande para alojar todas las piezas dentarias.
Además de ser un problema estético, esto dificultaba su limpieza lo que podía dar lugar a la aparición de caries o en el futuro podría generar problemas en las encías y la articulación.
El tratamiento ha consistido en una primera etapa de 52 alineadores y una segunda de 27 para mejorar detalles. De esta forma, hemos conseguido recolocar las piezas dentales de una manera precisa, indolora y estética.
Hemos perfeccionado el resultado con un tratamiento de blanqueamiento de 2 semanas de duración. Paciente encantado, ortodoncista más.
La ortodoncia va mucho más allá de la colocación de los dientes, ya que ayuda a solucionar trastornos funcionales de la masticación y puede corregir alteraciones mejorando la estética facial y la función dental.
Por fin puede sonreír sin complejos; pero lo más importante es que ha recuperado la función de su boca.